Esguinces de tobillo
Hola, hoy vengo con otro post en el que hablaré de los esguinces de tobillo. Hace un tiempo hice una infografía y hoy voy a extenderme un poco más. Aunque parezca muy básico, los esguinces de tobillo que son más leves, que podemos llamar torceduras, son frecuentes en nuestras consultas. Bien sea por el tipo de pisada o la morfología de ese pie que favorezca que esta lesión se produzca.
Vamos a hablar sobre ellos. Comenzamos...
Podemos definir el esguinces leve o torcedura como un desgarro de la cápsula articular o los ligamentos que rodean a la articulación. Pero sin rotura ni inestabilidad articular. Producido por un aumento del rango articular en un momento dado.
Se suele acompañar de dolor, edema que puede provocar cambio de color por la vasoconstricción en la zona.
Desde nuestro campo, podemos guiar al paciente en la reducción de la tumefacción e inmovilización, en mi opinión mucho mejor vendaje neuromuscular que funcional o yeso.
No entraré en la anatomía del tobillo ya que no lo veo tan interesante en esta ocasión, tal vez, hablemos de ello en el futuro.
Ahora sí, vamos a los esguinces. Aquellos que afectan a las partes blandas, la cápsula, los ligamentos y los músculos.
No es una lesión grave pero sí que pueden perdurar sus secuelas durante mucho tiempo. Un esguince mal curado puede presentar un problema de inestabilidad articular porque la mortaja lateral es la que da consistencia o pérdida de elasticidad de los ligamentos que conforman la mortaja (lateral interno, lateral externo y el tibio-peroneo).
Generalmente, el esguince se sucede en un primer momento la supinación del pie que lleva a la rotura del ligamento externo o interno (menos frecuente el primero), después el ligamento tibio-peroneo, seguido de la luxación del astrágalo. Muy importante, la luxación suele quedar reducida al poner el pie en el suelo, por lo que muchas veces, se diagnostica un esguince normal sin luxación de astrágalo, cosa que en la gran mayoría de los casos SÍ se ha sucedido.
La radiografía y ecografía son de gran ayuda para ver el grado de la lesión, de lo que dependerá nuestro tratamiento y el pronóstico que tendrás.
Se puede llegar a operar para reparar los ligamentos, seguido de una esmerada rehabilitación. En muchos casos se sucede la inmovilización mediante yeso IMPORTANTE al realizarlo sujetar la mortaja. si queda bien reducido se cura el 100%. A tener en cuenta que debemos evitar las secuelas, para ello, es esencial que el paciente camine, apoye y mueva los dedos (principalmente para evitar la atrofia muscular).
La inestabilidad crónica de tobillo puede deberse a esa atrofia muscular tras el esguince.
A recordar:
- Los esguinces leves o torceduras no son importantes y remiten prácticamente sin hacer nada.
- Se debe tener en cuenta que puede haber luxación del astrágalo y valorarlo, ya que muchas veces, al apoyar el pie tras el esguince puede quedar reducido.
- El tratamiento se puede hacer pasadas 24h desde que sucedió la lesión y en ese tiempo es muy relevante el reposo y frío.
- Debe apoyar los pies tras la inmovilización y mover los dedos para evitar la atrofia que puede dar inestabilidad crónica de tobillo.
- En los deportistas, se debe retomar la actividad deportiva entre 7-10 días tras la lesión.
Gracias por leerme,
Alba S.